LA VIDA Y EL TIEMPO
Reconozcamos que la vida y el tiempo son los mejores maestros en esta existencia que a veces se hace abrupta y en otras ocasiones parece que se desliza con la apariencia de placidez serena. Si lo pensamos bien, la vida necesita del tiempo para reflejar cada una de las tramas personales y colectivas que inundan nuestra existencia de objetivos y abundancias para colmar eso que llamamos una existencia plena. Pero el tiempo también necesita de la vida para seguir circulando a contrarreloj contra sí mismo, donde nunca perece pero siempre pasa. Comenzar un año es algo demasiado concreto para repudiar lo pretérito y abandonarnos con lo que pueda llegar. Por ello, a pesar de tantos ritos ancestrales y modernos, el tránsito de una nueva anualidad queda ensimismada con la fragilidad del brindis y la diversión bien justificada que nunca sobra. Será por ello que la reflexión siempre viene en ese primer día del nuevo año. En ese silencio de las calles que saben a la nocturnidad extendida pa...