ENTENDIDO EL MENSAJE

Comenzamos mes vacacional. A pesar de terremotos, pandemias a medio gas, guerras bélicas y económicas… julio inicia su andadura entre el calor y el deseo de descansar. En el interesante vaciado de las ciudades, que parecen respirar del ajetreo diario, se vislumbra una cierta calma con los ciclos que, a pesar de todo, no cambian. El que más y el que menos tiene su sesión informativa sobre la operación salida, los cuidados ante la subida de las temperaturas o las excitantes imágenes de las primeras playas alborotadas de gente. Todo ello bien documentado con las declaraciones in situ de veraneantes y profesionales del sector, salpicado de cierto optimismo ante las buenas perspectivas. Quedan a un lado los discordantes datos inflacionistas, la subida de la luz y, mucho más allá, Putin y sus secuaces. Es grandiosa nuestra capacidad de ignorar en poco tiempo todo aquello que nos dejó durante meses enganchados a esa última hora repetitiva que tanto cansancio provoca en nuestra vida dia...